Las empresas de propiedad de mujeres representan entre un cuarto y un tercio de las empresas del mundo. Sin embargo, prevalecen en los sectores menos productivos, y por tanto, son muy poco significativas en las cadenas globales de valor, como así también en las cadenas de suministro de empresas y gobierno.

En septiembre del año pasado en Sao Paulo, Brasil, líderes de pensamiento de todo el mundo se reunieron en una cumbre pionera (Trailblazers Summit) y emitieron un Llamado a la Acción de cinco años para llevar un millón de mujeres empresarias al Mercado, logrando así un crecimiento de la economía global a través de la participación de las mujeres en el comercio.

Líderes políticos encargados de la realización de políticas públicas, líderes institucionales, y líderes empresariales de todo el mundo son instados a identificar e implementar estrategias y políticas idóneas para el siglo XXI, con la habilidad para aprovechar la tecnología, fomentar los entornos empresariales propicios, establecer marcos institucionales de apoyo y aumentar la competitividad de las empresas que son propiedad de mujeres.

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